El pasado mes de septiembre, el grupo de investigación liderado por María del Mar Ortega-Villaizán, Eritrocitos en Inmunología Antiviral, estuvo en el Sincrotrón ALBA, más concretamente en la línea MIRAS, basada en luz infrarroja, con el objetivo de obtener datos que complementen el trabajo experimental realizado en las instalaciones y equipamiento del IDiBE. Esta infraestructura científica, ubicada en Cerdanyola del Vallès (Barcelona), consiste en un complejo de aceleradores de electrones que produce luz de sincrotrón, que permite visualizar la estructura atómica y molecular de los materiales y estudiar sus propiedades.
Gracias a la convocatoria de proyectos del Sincrotrón ALBA, que financia tanto la experimentación en sus infraestructuras, que es muy costosa, como las dietas de la estancia de los investigadores en Cerdanyola del Vallès (hotel, comidas, desplazamientos…) durante la realización de los experimentos, esta es la tercera vez que el grupo de Ortega-Villaizán analiza sus muestras en las instalaciones del Sincrotrón ALBA. Tanto en 2019 como en enero de 2021, el grupo estuvo en el Sincrotrón ALBA, en estas ocasiones, para obtener datos mediante la línea MISTRAL, basada en rayos X y cuya responsable es Ana Joaquina Pérez Berna, que realizó su tesis doctoral en el IDiBE (entonces IBMC). La financiación de cada proyecto de esta convocatoria pública, que se abre dos veces al año, se sitúa en torno a los 60.000 euros cada uno.
Reconstrucción tridimensional de un eritrocito de trucha arcoiris (Oncorhynchus mykiss) realizada mediante crio-tomografía de rayos X en la línea MISTRAL del Sincrotrón Alba.
En el caso de células o muestras biológicas poco estudiadas, como son los eritrocitos de peces, la crio-tomografía de rayos X (línea MISTRAL) y la microscopía de infrarrojos con luz de sincrotrón (línea MIRAS) permite obtener en un tiempo relativamente corto respuestas rápidas, precisas y globales sobre los cambios estructurales y moleculares de las células ante determinados estímulos sin modificar su estado, es decir, sin fijar o incluir, tal como se requiere en otras técnicas. Además, la correlación de los datos obtenidos por ambas líneas en condiciones fisiológicas, aporta una mayor información acerca del comportamiento de las células en estudio ante las distintas condiciones experimentales.
Además de la posibilidad de complementar el desarrollo experimental de los trabajos de investigación, la convocatoria de estas ayudas, suponen una gran experiencia para el equipo investigador. Así lo han vivido distintos miembros del grupo de Ortega-Villaizán, como Sara Puente, Iván Nombela, María Salvador o Verónica Chico, que acompañaron a su jefa en una o varias de las visitas al Sincrotrón ALBA.
El Sincrotrón ALBA está gestionado por el Consorcio para la Construcción, Equipamiento y Explotación del Laboratorio de Luz Sincrotrón (CELLS) y cofinanciado a partes iguales por la Administración española y catalana. Pertenece a la red de Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares (ICTS), grandes instalaciones, recursos, equipamientos y servicios, únicas en su género, que están dedicadas a la investigación y desarrollo tecnológico de vanguardia y de máxima calidad, así como a fomentar la transmisión, intercambio y preservación del conocimiento, la transferencia de tecnología y la innovación.
En la imagen de la portada: Sara Puente, María del Mar Ortega-Villaizán, Ana Joaquina Pérez Berna y Verónica Chico en la línea MISTRAL.